
Ha estado usted luchando por eliminar cargas de culpabilidad que le han echado sus parientes y/o amigos? Ha perdido usted su paz por sentirse culpable de algo en lo que no tuvo nada que ver? En este momento usted y yo aprenderemos cómo vencer este estado de ánimo y ser un ganador sobre culpabilidad.
Los siquiatras y sicólogos confirman que muchos de nuestros problemas emocionales y nerviosos, además de muchas de nuestras enfermedades, son provocadas porque tenemos luchas interiores no resueltas.
Nada, ni siquiera la medicina, el psicoanálisis, el alcohol, las drogas, el sueño, los viajes o diversiones, puede ayudar a una conciencia intranquila, hasta que tratemos con ella sabiamente.
EL PECADO Y LA CULPA
Para entender bien el tema de la culpabilidad, es necesario entender y aceptar la realidad del pecado. Todos hemos pecado, aun las personas "que no hacen mal a nadie" Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros.
En la historia, Moisés fue un homicida; sin embargo, fue perdonado y llegó a ser libertador del pueblo de Israel. David, el adulterio y asesino, también fue perdonado y fue llamado un hombre. La mujer samaritana, quien fue al pozo a buscar agua, llevaba la carga de haber sido casada cinco veces, y en ese momento vivía con un hombre sin estar casada con el. Pero ella aceptó el perdón de Cristo y se convirtió en una fiel testigo de su fe.
LA ALARMA DEL HOMBRE
Pero que sucede cuando el hombre peca? Un indígena experimento y dijo de esta forma “algo con puntas filosas en el corazón que empieza a dar vueltas y lastimar mucho”.
Si continúa pecando, su conciencia se puede acostumbrar, entonces sucederá lo que explicó el Indígena “las puntas se desgastan y ya no causan dolor”.
Los siquiatras y sicólogos confirman que muchos de nuestros problemas emocionales y nerviosos, además de muchas de nuestras enfermedades, son provocadas porque tenemos luchas interiores no resueltas.
Nada, ni siquiera la medicina, el psicoanálisis, el alcohol, las drogas, el sueño, los viajes o diversiones, puede ayudar a una conciencia intranquila, hasta que tratemos con ella sabiamente.
EL PECADO Y LA CULPA
Para entender bien el tema de la culpabilidad, es necesario entender y aceptar la realidad del pecado. Todos hemos pecado, aun las personas "que no hacen mal a nadie" Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros.
En la historia, Moisés fue un homicida; sin embargo, fue perdonado y llegó a ser libertador del pueblo de Israel. David, el adulterio y asesino, también fue perdonado y fue llamado un hombre. La mujer samaritana, quien fue al pozo a buscar agua, llevaba la carga de haber sido casada cinco veces, y en ese momento vivía con un hombre sin estar casada con el. Pero ella aceptó el perdón de Cristo y se convirtió en una fiel testigo de su fe.
LA ALARMA DEL HOMBRE
Pero que sucede cuando el hombre peca? Un indígena experimento y dijo de esta forma “algo con puntas filosas en el corazón que empieza a dar vueltas y lastimar mucho”.
Si continúa pecando, su conciencia se puede acostumbrar, entonces sucederá lo que explicó el Indígena “las puntas se desgastan y ya no causan dolor”.